1 punto para Vicente Seguí con Se me va la vida en Operación Triunfo 2004

Operación Triunfo moría por primera vez en el año 2004. El programa más visto de la historia de España, cuna de una nueva generación de artistas, y protagonista de un auténtico fenómeno social, agonizaba debido a una mala gestión y sobreexplotación del formato. La mayor evidencia fue la intrascendencia musical de sus cuatro artistas finalistas, y los 12 anodinos temas en competición. El canario y segundo clasificado del concurso, Ramón del Castillo, se impuso al ganador Vicente Seguí en la segunda final eurovisiva. Para llenarme de ti, producida por el todopoderoso Kike Santander, quien parece haber desaparecido de la faz de la tierra, llevó nuevamente a Europa los ritmos latinos con los que repetimos en el top 10. Se me va la vida, dentro de esa misma fórmula, sonaba mucho más antigua y casposa que su más directa rival, y especialmente indigna para un concurso que lo había sido todo en sus dos promociones anteriores.

2 puntos para Las Supremas de Móstoles con Eres un enfermo en Elige Nuestra Canción 2005

Todavía sentimos escalofríos cada vez que recordamos Elige Nuestra Canción, la que sin ninguna duda fue la peor y más vergonzante preselección de España para Eurovisión, a todos los niveles, artístico, técnico y televisivo, y para más inri con agravio comparativo después de la época dorada triunfita en el festival. Las hermanas Luisi, Susi y Vicky, Las Supremas de Móstoles, ocuparon todos los titulares y la atención mediática en los días previos a la final nacional, por el llamativo aspecto del grupo, cual señora de extrarradio, y su pintoresca copla, con un tema de rabiosa actualidad en cualquier patio de vecinas como el cybersexo, las infidelidades y el interné. A pesar de que la candidatura fue rápidamente tachada de friki, y algunos pusieron el grito eurofan en el cielo, lo cierto es que hoy en día nadie dudaría en cambiar el destino, y llevar estos tres vozarrones con una carrera increíble, un temazo que es toda una joya kitsch, y una candidatura que se habría anticipado, pero en un sentido positivo, a nuestro Rodolfo Chikilicuatre, o a las Verkas Serduchkas, Buravnoskiyes Babushkis y demás flora y fauna eurovisiva que conocimos a posteriori. Finalmente fueron otras tres hermanas, Espe, Sole y Lola, las Son de Sol, quienes para sorpresa de todos ganaron la previa y, a pesar de su buen hacer dentro de lo posible, no pasaron de un pírrico puesto 21.

3 puntos para Ainhoa Cantalapiedra con Mi razón de vivir en Operación Triunfo 2003

Ainhoa Cantalapiedra fue la flamante ganadora de la segunda Operación Triunfo. Al igual que sus compañeros, el hoy ídolo de masas Manuel Carrasco, y la resignada ganadora Beth Rodergas, recibió tres canciones para la final de finales. El proyecto de himno eurovisivo Mi razón de vivir, obra de Rafael Artesero, fue su opción favorita para el jurado y el televoto, eliminando a la primera de cambio Qué viva la noche, la cual se convertiría en un todo éxito veraniego, pero no en su voz, sino en la de Russia aka Yulia aka Yulia Valentayn, escribiendo el primer capítulo del gafe de la vasca. Dime ganó la partida desde el primer compás, con un plató que se vino abajo en los míticos estudios de Gestmusic de Sant Cugat del Vallés en Barcelona, y un público volcado con su paisana que se llevó el disgusto de su vida. Para colmo de males, Beth consiguió así el mayor éxito de ventas de su carrera musical, y Dime ha pasado a la historia como una de las mejores y más recordadas eurocanciones españolas en el certamen, incluso, haciéndonos nos hizo soñar con algo más que su octava posición.

4 puntos para Mirela con La reina de la noche en Misión Eurovisión 2007

Después de la era Operación Triunfo, y una final nacional y una elección interna de transición, TVE diseñó un nuevo formato de preselección que, sin embargo, no obtuvo los resultados esperados ni en audiencia ni en el propio festival. La Misión Eurovisión tuvo a lo largo de su interminable hoja de ruta dos competiciones paralelas, una de cantantes y otra de canciones, y 25 combinaciones finalistas, cinco temas para cinco artistas. El concurso estuvo plagado de polémicas, desde fallos de sonido en algunas actuaciones, como el playback en la gran final de La reina de la noche, hasta vetos a algunos concursantes como a Coral Segovia, a quien su discográfica, casualmente la misma que D'Nash, impidió actuar en su eliminatoria aun estando presente en el plató, sin olvidar la guerra televisiva que el grupo liderado por la gran hermana Sonia Arenas, NoSon2, pretendía con esta misma web por contar unas cuantas verdades. La Tanqueta de Leganitos, Massiel, tambien avivó la llama del eurodrama, al ser apartada de su cargo como jurado en la última gala, sugiriendo un trato de favor hacia determinados participantes. Finalmente, el cuarteto fue el que se llevó el gato al agua de Helsinki 2007 donde se clasificaron en vigésima posición, mientras todavía resuenan los ecos y retumban los glamurosos andamios de las gradas de los estudios de TVE al grito de: ¡Mirela a Eurovisión!. 

5 puntos para Coral Segovia con Todo está en tu mente en ¡Salvemos Eurovisión 2008!

No se le puede negar a TVE la buena idea, la innovación y la originalidad que supuso en su día ¡Salvemos Eurovisión!, ni la profesionalidad de muchos de sus responsables, ni el fenómeno social que prvocó su resultado, aunque los eurofans entráramos en cólera, y con razón. Las buenas intenciones de la preselección pronto se aprovecharon para que unos manipularan las votaciones de la plataforma online, otros metieran la zarpa, y la televisión pública entrara al trapo. A la final nacional presentada por Rafaella Carrá, sin Toni Camo ni Rappel, no pudieron llegar buenas apuestas como Anael, Mayte o Yanira Figueroa, ni tampoco Antonio González 'El Gato', quien con su 'bicicletera' ganó la fase previa con las mismas artimañas que el personaje de Andreu Buenafuente. A pesar del nunca aclarado sesgo por votos fraudulentos, y las diferentes varas de medir unas trampas y otras, sí teníamos dos grandes oportunidades entre las diez supervivientes. Con el permiso de Coral Segovia, no la vamos a mencionar, porque su gran momento le llegaría dos años después, y porque lo de La Casa Azul no te lo perdonaremos jamás, Federico Llano, JAMÁS. Mientras que las dos Españas se dividían entre los que se echaban unas risas y los que se rasgaban las vestiduras con el asunto, El chiki chiki pasó por Belgrado cosechando un decimosexto puesto, una marca que a partir de entonces se convirtió en la frontera del éxito o del fracaso eurovisivo.

6 puntos para Raúl con Sueño su boca en Eurocanción 2000

El resultado de Eurocanción 2000 fue una de las mayores meteduras de pata de la historia de TVE en Eurovisión, no solo dando una segunda oportunidad a Serafín Zubiri, después de su fracaso previo en 1992, sino prescindiendo del evidente potencial de un Raúl, quien comenzaba a dar los primeros pasos de una carrera en la que poco después decoraría todas las habitaciones de las niñatas de la época con sus pósters centrales de la Bravo y la Súper Pop. Sueño su boca fue la canción del verano 2001, número 1 en todas las listas de éxitos y ventas, presente en norte a sur en fiestas y verbenas, y con un baile que hoy en día todo el mundo ha cronificado. Serafín Zubiri, cuyo videoclip fue rodado en el plató del mítico Música Sí (Holi, Sandra Morey), empeoró su propio resultado, del 14 en Malmö 1992 al 18 en Estocolmo 2000, y Raúl volvería a intentarlo, una vez más sin suerte, en el año 2014.

7 puntos para Melody con Amante de la luna en Eurovisión 2009: El Retorno

Un año antes, en El Retorno, también vivimos una preselección muy polarizada, con varias guerrillas, pero con dos bandos claramente diferenciados entre Soraya Arnelas y Melody sin Los Vivancos. El segundo capítulo del Trienio MySpace nos dejó un programa surrealista, con Alaska de maestra de ceremonias, donde destacaron los abandonos, accidentes, enfados, polémicas y protestas en el pintoresco escenario del Casino l'Aliança del Poblenou de Barcelona reconvertido para la ocasión en el parque de atracciones del eurodrama. La niña del gorila recibió la máxima puntuación del jurado, a pesar de quedarse en la gran final compuesta y sin Vivancos, pero la audiencia rebatió su decisión apoyando a Soraya que hacía así las maletas para viajar de Valencia de Alcántara a Moscú. La noche es para mi fue una de las grandes decepciones de España en Eurovisión, relegada al vigesimotercer y antepenúlimo lugar de la tabla, mientras que muchos todavía lamentan que Amante de la luna, una fórmula que hoy se echa de menos pero en su día estaba muy trillada después de varios fracasos cortados por el mismo patrón, no se llegara a taconear en el majestuoso escenario de la capital rusa. 

8 puntos para David Bisbal con Corazón latino en Operación Triunfo 2002

Rosa ganó Operación Triunfo y representó a España en Eurovisión 2002. Tanto se podría recordar, escribir y contar de ese momento histórico de la televisión española que lo dejaremos para otra ocasión y nos centramos en la temática en cuestión. El álbum Corazón latino de David Bisbal, en donde se encontraba su candidatura eurovisiva, vendió 1.200.000 copias en España y 400.000 más a nivel mundial, comenzando la carrera musical del que se convertiría en el solista masculino español más vendedor de la década. Una canción que sonó y sigue sonando, no solo en nuestro país, sino a nivel europeo, y hubiese peleado por la victoria en el festival de Tallín 2002 que, a día de hoy, sigue siendo el programa no deportivo con mayor audiencia de la historia de España. Lo que pudo haber sido, y no fue, pero sea como fuere, Rosa siempre será la Rosa de España. 

10 puntos para Brequette con Más (Run) en Mira Quién Va a Eurovisión 2014

¡Mira Quién Va A Eurovisión! tuvo desde el principio dos claras favoritas, dos artistas desconocidas para el gran público que comenzaban su carrera discográfica, una murciana que concursó en Factor X en el Reino Unido, y una sudafricana afincada en Canarias que participó en La Voz. El combate cuerpo a cuerpo que se jugaba en las encuestas y listas de ventas también se trasladó a una comunidad eurofan, totalmente dividida y enfrentada en las redes sociales y foros de opinión, hasta extremos desagradables que llegan hasta el día de hoy. La rivalidad se tradujo en un empate técnico en la final nacional, con un jurado formado por David Bustamante, Merche y nuestra amiga Mónica Naranjo que benefició a Brequette Cassie, y una audiencia que se quedó con Ruth Lorenzo. Run (Más) no llegó a Eurovisión, pero permanece en la memoria colectiva por su indudable calidad musical y una carismática y emotiva actuación que llegó a provocar las lágrimas y el teatrillo de una Pantera de Figueras entregada a la causa eurovisiva, vivir para ver. Dancing in the rain obtuvo el pasaporte a Estocolmo, donde conserva el mejor resultado de nuestro país en el festival de los últimos 12 años, junto a Ramón y Pili de Coria.

12 puntos para Coral Segovia con En una vida en Destino Oslo 2010

A lo largo de la historia del eurodrama ha habido conflictos, batallas y guerras, pero si hay uno que alcanzó la categoría de mundial, fue el vivido en Destino Oslo. Coral Segovia llegó a los desaparecidos Estudios Buñuel como la favorita a representar a España en Eurovisión 2010, con los eurofans a una, y un buen número de seguidores que se dejaron las huellas dactilares votando en la plataforma online previa dispuesta por TVE y MySpace. Sin embargo, no fue ella, sino Daniel Diges, el que obtuvo el respaldo mayoritario tanto de los expertos como de la audiencia. Coral se volvía a quedar a un paso de cumplir el sueño de una vida, y con el agravante de que su rival le ganó la partida con un proyecto producido por amigos íntimos. Este disgusto profesional y personal provocó que en días posteriores soltara perlitas en los medios de comunicación que han pasado a nuestra historia eurovisiva, como “La puñalada trapera” o “Europa me quería a mi” e, incluso, leyendas urbanas, como ayudar a TVE a destruir antes de tiempo el mobiliario de Los Buñuel. Lo cierto es que En una vida, más allá de filias y fobias, y sin desmerecer a Algo pequeñito, ni su decimoquinto puesto en Oslo, es una de las mejores canciones que TVE ha podido presentar al certamen, y siempre nos quedará la duda sobre la reacción de La Segovia ante la invasión de sus dominios de Jimmy Jump. Todo está en nuestra mente.

Bonus Track 1 para Auryn con Volver en Destino Eurovisión 2011

Gestmusic fue la responsable en el año 2011 de la final nacional española, Destino Eurovisión. La dinámica estaba dividida en dos categorías, por una parte, los cantantes, en la que Lucía Pérez, Auryn y Melissa superaron las eliminatorias y semifinales, y por la otra, las canciones, con nueve temas elegidos entre las más de 1.000 maquetas recibidas que, a juzgar por la selección, podrían haber hecho perfectamente a sorteo. Durante la gran final, el jurado asignaba un tema a cada artista, Auryn y Melissa consiguieron así su propuesta favorita, mientras que a Lucía Pérez le encasquetaron la opción que menos le gustaba gracias a la opinión entendida de Boris Izaguirre, Sole Giménez y cía, y ante el monumental enfado de la artista gallega, la presentadora y otros jueces. No obstante, Galicia se volcó igualmente con su paisana, con una trayectoria musical y televisiva consolidada en la región, inclinando la balanza hasta un impresionante 68% de los votos, y dejando atrás en la carrera a Düsseldorf a Auryn, quienes se convertirían en un fenómeno fan en España, y a Melissa, que probaría suerte posteriormente en la preselección suiza. Que me quiten lo bailao se quedó en la penúltima posición de Eurovisión 2011, aunque con 50 puntos, el decimosexto puesto del televoto (Por encima del promedio de Pastora Soler y Ruth Lorenzo), y dos 12's procedentes de Francia y Portugal (El mayor número de máximas puntuaciones desde Ramón).  

Bonus Track 2 para Hi Priority con A nadie como a ti en Eurocanción 2001

En el inolvidable escenario de Eurocanción 2001, y sus recordadas macetas, vimos por primera vez no solo a David Civera, sino también a Luna, posteriormente Merche, y Mercedes Trujillo en su partida de nacimiento, o a Sonia y (S)elena. Curiosamente, ninguno de los llenapistas de discotecas y chiringuitos de esos añorados veranos de los dosmiles fueron los subcampeones, sino la enésima versión de La Década, Hi Priority. Con mucha pluma, brillí brillí y plataformas, A nadie como a ti, insistía en la fórmula ABBA de grupos mixtos, melodías festivaleras y coreografías tontorronas. Afortunadamente, fue el turolense, con sus desatadas coristas ucranianas, el que viajó a Europa, con una canción que devolvió el éxito musical y las audiencias masivas a Eurovisión, y comenzó una carrera de éxito de la que nos sabemos (casi) todas sus coreografías. Por cierto, ¿Qué fue de nuestra idolatrada Sandra Morey?.